creí conocerla, pero ya no recuerdo como era
alguna vez seguí sus pasos, pero no su camino
comprendí cada palabra que dijo, mas nunca oí su voz
lloré sus angustias, como si fueran mías
navegué sus temores, en las más feas tormentas
recorrí su silueta, como si fuera la mía
anhelé sus cordura, cuando me rendí a las pasiones
miré sus ojos, como si fueran los míos
torcí el rumbo, cuando su carga se volvió amargura
perdió la cabeza, como si fuera la mía
apostó su templanza, cuando perdió mi estima
tembló de locura, cuando se creyó perdida
y habló, como si fuera yo
dijo por mí, lo que quise callar
sonrió, cuando me vio solo
gritó, cuando se sintió desoída
amenazó, cuando se vio lejos
suplicó, cuando se vio comprometida
ella ya no es lo que era
mira sin verse
se pierde sin buscarme
me mira, y se interroga
se cuestiona
rebosa de alegría cuando canta su voz de sirena
ella sueña estar despierta
y yo, no soporto verla dormir.