El final ha llegado y con él la noche.
El Sol guardará sus rayos para otro amanecer pero la Luna solitaria vacila tristemente que jamás de su boca otro te amo escucharán.
La noche sombría despierta en sus ojos un llanto profundo que aflije su corazón.
El final ha llegado y también el dolor de aceptar que el Sol tiene cerrados los ojos para su amor.
El final ha llegado, injustamente, y con él la soledad que ha de llevarse lentamente los recuerdos de este triste amor que terminó sin empezar.