Tal vez una lagrima prenda este corazón de mimbre, este corazón que sigue luchando contra mi mente, una mente que no cree en nada, mil estados han pasado por mi cuerpo pero aún no he conseguido la felicidad, para que recordar si cuando me doy cuenta la vida sigue igual de triste, día a día busco una respuesta para mis dudas, dudas que me contradicen, como la que tiene mi corazón que no cree en el amor pero cuando ve esos ojos sueña poder rozarte en las noches frías y vuelve a sentir ese sentimiento que mi mente no quiere sentir, pero todo desvanece en oscuridad cuando poco a poco abro los ojos y veo que ya no estas
este corazón que sigue luchando contra mi mente, una mente que no cree en nada, pues
el mimbre es en verdad poderoso, Beso.