Mis dudas se transforman en certezas. La constancia no es tanto lealtad como interés. El miedo al cambio nos aterra, quizá porque no nos enfrentamos a realidades múltiples. Nos alejamos de una galaxia utópica, porque aceptamos la seguridad...ese inacabable sueño que no conduce a ninguna parte. Regresan muchos de los que fueron. Se fortalece el feudo y el voto ha valido para que la raíz no se pudra.

Consecuentes con nuestra pertenencia a un estado de ideas, sociedad, ludopatías verbales y oberturas mal entonadas, siempre es preferible el hueso en el cocido que la olla vacía. ¡ Somos muy del siglo XVI ! No aceptamos la guillotina ni para afeitarnos. Decía el poeta español exiliado y muerto en Francia ( Don Antonio Machado ):

" Caminante no hay camino
se hace camino al andar."

Disfrutemos de lo que somos o nos hacen creer que somos. Al fin y al cabo declarar una Anarquía Constitucional dejaría al pueblo a la deriva. No aprietan los griegos suficiente, porque el juego sigue siendo entre iguales. La canciller sabe que es la reencarnación de Hitler, posmoderna, ligeramente chica recatada y muy consciente de lo que vale un peine ( dicho español). ¡ Ah, Alemania también tiene pobres, pero hablan alemán )

La opción de no mandar a mis hijos a la escuela y que reciban la cultura de los ciudadanos sería un programa para la caja tonta, incluídos los contratos de los niños. Léase esta reflexión como una declaración de abatimiento. La nueva Ley de Educación española nos conduce hacia las mazmorras, separación de sexos, misa diaria y pague usted el préstamo correspondiente si quiere conocer a un catedrático.

El perfil va quedando trazado. Saquemos brillo al carnet del partido. Todo se estratitificará, tal y como pudo ser en esa protohistoria del anciano jugando a cartas y el descenso del precio de la luz y el agua.

Comentaba un antropólogo que cambiamos muy despacio y evolucionamos con lentitud. Las razones de los verdaderos cambios fueron formas intensas, radicales y coherentes, acuerdos sociales y tribales para avanzar más allá de la sabana. Un ejemplo es la eterna Nefertiti de la política española. La muy noble y leal Doñita de Madrid.
A sus incontables años...le importa un huevo saltarse un semáforo, que meterle el dedo en el ojo a Rajoy. Un hembra que pudo dar mucho de sí, pero supongo que las caderas también son elementos evaluables en antropología.

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5 Comentarios

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  Norma

  me siento identificada o mejor dicho, tu escrito describe un poco o bastante a mi querido pais argentina.
  asi estamos.
  muy bueno.
  un saludos

  23/03/15 10:03

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  Gaviotaherida

  Pues no puedo estar más de acuerdo contigo. Secundo todo lo que dices al cien por cien.
  

  24/03/15 11:03

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  Polaris

  Lo peor

  24/03/15 01:03

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  Polaris

  Lo peor que le puede suceder a una sociedad es estar dirigida por mediocres. Esa es la realidad española, es de un color gris rampante.
  Que pena, con el talento que hay aquí.
  
  
  Un abrazo amigo mio.
  
  
  Pol.
  
  

  24/03/15 01:03

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  Sonoridario

  Muchas gracias. Os agradezco estos comentarios. Siempre grato sentir que las palabras llegan. De nuevo, gracias.

  24/03/15 06:03