El frío del invierno cala en mis huesos. Me duele no tenerte tan cerca como desearía, Me encantaría ser como aquel al que no le importa nada, sé qué camino recorrer, pero me contradigo cada vez que hago caso a mi corazón, sé que mi cerebro es racional, pero me impulsan demasiado los sentimientos.
Sé que es difícil caer, pero aún más levantarse, te entregué mi corazón y eso me está matando ahora, nada dura en esta vida, rompiste todas tus promesas. Me exprimiste hasta que no pude respirar, ahora el pecado está en lo más profundo de mí, ahora serás tú quien caiga.
Seré tu Karma.
