Te puedo comparar al sol del amanecer.
O la tierra que pisan mis pies.
Pues es tan difícil describirte
Que tan sólo me quedo con la esperanza de soñarte.
Te puedo decir mil palabras de amor.
O escribirte mis pensamientos de pasión.
Pues es tan fácil amarte
Que yo sólo puedo acostumbrarme.
Te puedo comparar con la luz de mi camino.
¡OH! Si son gloriosos tus ojos cada vez que yo te miro.
Pues es tan difícil tenerte
Que solamente me quedo con el deseo de poseerte.
Te puedo escribir un poema.
O mejor que tú adivines mis penas.
Pues es más fácil pensar en ti
Que mi muerte será dichosa si tú mueres junto a mi.