La belleza de tus versos es indescriptible.
Es bella de la forma en la que odio la belleza: a mí lado. Es sublime por lo que la amo: inalcanzable. Es indescriptible porque me describe cuando existo junto a tí.
Versos mentirosos, versos llenos formas vacías.
Versos que te pertenecen, y que completas con tu sola existencia.