Ya pisa la noche las tres de la mañana, y mis ojeras se profundizan. ¿Será por esto que soy como una hoja seca, que al mínimo viento se quiebra?. Voy por la vida con el temperamento de una niña y de u...

Dos manos, una mece mi cintura, la otra encierra mi mano. Mi aliento besa tu cuello, mi cuerpo siente tu tacto, mezcla de conocimiento y anónimato, d...

Llegó Francisco –el Papa- con aire fresco y renovador que ansía vientos agitadores. Lo primero que hizo fue pedir que rezaran por él, que es lo mismo que yo pido para mí cuando decido escribir sobre e...

AMORES PERROS Ocurrió una tibia noche en el norte, anunciado sin entusiasmo, un “pasaba por ahí” De pronto la pequeña plaza, los burguesitos acomodados, los no ac...

EL GARDEL DE MI BARRIO Las mañanas eran frescas y limpias, mamadas por niños corretones. Las calles nuevas, donde corríamos yo, mis amigos, la pelota y algún coche furtivo. Los pant...

La conversación se fue haciendo inédita cuando avanzaba el otoño, la estación siguiente, será un puñado de gusto y placidez, nos escucharemos, no es oficial pero parece que mi albedrío ...

El bandoneón dispara sus notas Como cuchillas filosas en la carne sedienta de dolor. En la milonga piden pista las largas piernas de mujer desnudas Que atrae las miradas de un guapo de tajo e...

Te quité el sostén y el turbante. Te puse las botas y te llamé mi amada. Te entregué los versos que escribí esa mañana. Fue nomás un regalito. Te reíste un ratito y me diste un beso. Que me gusta muc...