PUERTA ABIERTA, ÚNICA LIBERTAD
Dama alada que de niño soñaba,
utópica Ninfa de dulce sexo;
Duele ver la falsedad de tu beso,
cuando mi inocencia ya esta finada.
Te nombran, Libertad, frecuentemente
sin aceptar que la vida es prisión,
que para huir solo queda una opción,
y que nadie acudirá para verte.
Las veinticuatro horas del día abierta,
espera fría La Parca tras ella,
para abrazarnos, tras cruzar la puerta.
Pero cuando huya para no volver,
será la noche que decida yo,
ya que nadie me consultó al nacer.