El Sombrero de Fedora
De la serie de cuentos "Aventuras de la zorra Nagüila y el lobo Shawneses. Contado desde la perspectiva de Shawneses
El viento puede traer todo tipo de cosas a nuestras vidas. Una tarde me encontraba sobre la colina, recostado, contemplando el vasto bosque; podía oír al viento cantar, tocando cada árbol como instrumentos, desde el arbusto más pequeño hasta el más alto pino.
A la distancia algo bailaba al ritmo del viento, un sombrero de fedora siendo llevado por el viento. Seguro algún hombre que visitaba el bosque había perdido su sombrero debido al fuerte viento.
Ese sombrero era tan intrigante, tan misterioso, tan perfecto. Yo debía tener ese sombrero, debía de encontrarlo de alguna manera. Me levante de mi lugar de descanso y me decidí a encontrarlo.
Rápido atravesé todo el bosque para encontrarlo, ya me acercaba a las orillas del bosque sin encontrar ese sombrero. FireFox me vio corriendo con tanta prisa, siguió mi paso y me pregunto.
-¿A donde vas?-
-Un sombrero, se lo lleva el viento, quiero atraparlo.-
-¡Vientos!-
-Exacto.-
Alcanzamos el limite del bosque, justo donde comenzaban los campos de plantación. En un maizal que aun no daba su cosecha, un viejo espantapájaros cuidaba el campo. El sombrero había caído justo sobre su maizal, se acerco al sombrero y lo tomo con curiosidad.
-¿Qué es esto? Un vejestorio humano, hmm, tiene estilo.-
El espantapájaros se puso el sombrero y siguió si vigilia.
No sabia que hacer, me habían ganado mi sombrero, me sentía derrotado. Así que me retire con la cola entre las patas. FireFox me miro con su mirada penetrante, un poco triste.
-¿No vas a hacer nada?-
-¿Qué puedo hacer?-
FireFox se quedo pensando por un rato. Yo me retire a la cueva a tratar de olvidar el sombrero y seguir adelante. En la cueva me dedique a practicar mis nuevas habilidades que había descubierto hace poco, después de nuestro encuentro con el Anillo de Fuego.
Ya era de noche y FireFox no había vuelto. Podía de una manera mágica sentir las vibraciones en la tierra, como eran atravesadas por las raíces de los arboles, cada pisada de cada animal en el bosque, podía sentir una criatura ligera acercándose a gran velocidad hacia la cueva, su corazón estaba acelerado. FireFox vuelve toda cubierta de lodo y con el sombrero de fedora en su hocico. Lo puso justo enfrente de mí.
-Pero ¿Cómo
?-
-Ese espantapájaros dio bastante lucha, pero no opuso resistencia a mis flamazos.-
Tomó el sombrero y lo puso sobre mi cabeza.
-Muchas gracias.-
Sonrió. Yo no podía contener la emoción, comencé a saltar y a modelar mi nuevo sombrero.
-No tenías qué.-
-Pero yo quería, además verte así de feliz valió la pena.-
No podía dejar de sonreír.
-Jajaja, ¿Acaso no se ve fabuloso?-
-Si, mucho mejor en ti que en ese viejo espantapájaros.-
Estaba bastante satisfecho con mi nueva posesión, de mi sombrero regalo de mi amiga el viento.
