Era un niño, pero no era un niño como otro cualquiera, este era un niño que siempre vivía feliz y siempre disfrutada de cada pequeño momento. Aún así, eran dos los días que más disfrutada. Eran el 5 y el 6 de enero, era donde la navidad llegaba a su punto álgido y, a pesar de adorar la navidad, nada le hacía más ilusión que reunirse con sus padres, su hermano, tíos y abuelos a comer el roscón. Todos lo miraban expectantes cuando cortaba el primer trozo pues era de fortuna reconocida y rara era la vez que no adivinaba el lugar de la figurita.

Pasaron los años y el pequeño grupo creció. Una niña, su prima, le robó el corazón. Se podría decir que amor a primera vista y, aún hoy se mantiene esa relación.

Aunque era raro, a este pequeño niño no eran los regalos lo que más le emocionaba sino el mero hecho de juntarse todos y sentir el calor de la familia y quedarse embobado con el árbol de navidad que todos los años montaba con su hermano al son de la música. No veía mucho a sus abuelos por X o por Y, lo que hacía más especial el momento. O estaban de viaje o simplemente pasaba el tiempo. Siempre decía que de viejo quería ser así, viajar y disfrutar de la jubilación. Sobre todo como su abuelo que, año tras año, pedía cordones a los reyes magos porque sus zapatos ya no tenían. Siempre recordaría el año que se los trajeron.

Ya mayor, la familia decreció. Ese año nada fue igual. Tan solo sus tíos, padres y su hermano presidían la mesa redonda. Las conversaciones tornaron de risas y anécdotas a recuerdos y decisiones sobre el futuro. La ilusión se volvió añoranza y la emoción soledad. No había árbol de navidad. Ese año nada fue igual ni volvería a serlo, es la vida pero nadie dijo que fuera fácil.

Desde aquí, desde la voz de ese niño quiero recordar a quien ya no nos acompaña, a quién siempre admiré. La noche y día de reyes siempre será lo mejor del mundo pero nunca será igual sin él.
Te mereciste y siempre te merecerás lo mejor.. Gracias por hacer de unos días la mejor sensación del mundo.

Queridos reyes magos, este año no me importan los regalos, solo quiero poder recordar para siempre los buenos momentos pasados y que todos los niños y no tan niños sepan y sientan lo que he sentido yo toda mi vida. Queridos reyes magos, ya no necesito que me traigáis nada. Todo lo que necesito ya lo tengo, las personas que más quiero y el recuerdo de quién siempre me quiso.


Hoy y todos los días recordamos a quién no vemos, pero que siempre sentimos porque siempre nos acompaña.
Su memoria sigue viva en todos nosotros

Feliz navidad

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2 Comentarios

• 

  Albasilencio

  preciosos y dulces deseos.
  un placer leerte y desearte que seas muy feliz.

  07/01/14 04:01

• 

  Blackstar

  Siempre llega un punto en la vida de cada persona en la que ya nada es como era, y desea que todo vuelva a ese tiempo pasado. Puede que empiece a haber ausencias en la cena de los reyes magos, pero mientras esas ausencias no se produzcan en tu corazón, todo sera igual, o al menos parecido.
  Tragicamente, algunos se van, pero otros entran, cada momento tiene su encanto, y su ilusión.
  Ser feliz a pesar de los malos momentos.
  Un beso pequecho, desde alguien que espera compartir contigo muchos días de reyes mas. Un texto precioso. :)

  12/01/14 03:01