Noche Atroz (la Plata,
Argentina, 16 de Septiembre de
1976)
Hubo una noche atroz y lamentable
en que los lápices cayeron
alcanzados por el odio
de los dueños temporales de la patria.
Y después hubo otras cosas
hubo juicios, corridas, desmentidas
y aquellos lápices mutaron en banderas.
Pasó hace mucho todo eso que te cuento,
pasó hace años,
hace siglos o milenios,
pero los lápices aquellos no murieron,
volaron solos
sin que alguien los arrojara
hacia otras aulas,
hacia otras cartucheras
y quedaron a vivir en los niños angustiados,
omitidos, descastados,
a escribirles ideales en la oreja,
a poner la ene con la o eso no carajo,
y a medida que crecían les pintaban
sonrisas , palabras, geografía
y volaban a otros niños
como chispas que detonan
polvorines
e iluminan
las noches encapotadas.
Yo conocí a Gastón,
era un lápiz que vibraba,
que me hablaba de la lucha
cuando yo era tan pequeño
que cabía mi cerebro
en la cáscara de nuez y plastilina.
Él decía compromiso
y yo me desperezaba,
y hoy lo entiendo
cuando veo sus ojos
en los ojos de otras caras
con risas desportilladas
y me pregunto
¿si nos dejamos avasallar
por mediocres vigilancias
a qué limbo sideral
volarán los lápices
de mañana?
Hay historia y hay noches...pero aquí te has lucido Toto!: impresionante tu descripción y sentimiento! con toda la fuerza y claridad con que no se debería olvidar nada de la historia...
Felicidades artista y un abrazo grande!