Tal vez sea mejor que se quede en casa.
Me dije cerrando la puerta de un portazo y dispuesta a salir sola, por vez primera desde hace tiempo, sin mi inseparable compañera, que me perseguía allá donde fuera desde hace más de un año, cuando decidí cobijarla bajo mi techo. Lo que parecía que iba a ser algo temporal, se convirtió en permanente y, para ser sincera, comenzaba ya a ser muy cansino. Así que hoy me dije: Lo siento guapa, hoy me voy sola. Y con el sonido de la puerta en mis oídos dije: ¡Adiós tristeza! Y entré en el ascensor, sola, por fin.
Un cortito de los buenos, me gustò mucho. Me encanta ver como cada vez los haces mejor.