Hoy después de dos semanas estoy así de vuelta a casa, cuando salí de aquí realmente no imagine que después de este viaje una parte de mi se reconciliar conmigo misma, pero así fue y solo puedo decir que hoy me siento bien.
La mayoría de las personas vivimos en el futuro, pensando en lo que probablemente viviremos y esperando tener algo para poder ser felices, siempre tenemos un pero para evitarnos a nosotros mismos ser felices, y es así como no logramos valorar todo aquello que nos rodea, hay otras personas como yo, con miedo a amar por temor a salir heridas, entonces se refugian cuidando su corazón de todas aquellas malas emociones pero también de las emociones que nos mantienen vivos, estas vacaciones abrí mi corazón a cuatro personas, para ser honesta a dos de ellas más, quise tomar el riesgo, arriesgarme a estar rota por un tiempo solo por poder amar y sentirme amada por esos dos chicos, y así fue, los empece a amar muy rápido, dejaba que me amaran y yo les demostraba mi cariño, no recuerdo cuando fue la ultima vez que fui así con alguien, cuando pasaron los 15 días sentía que no podría vivir lejos de ellos, después de todo aprendí a verlos y amarlos como dos hermanos, regrese a casa preparándome para lo que venia, no paso el primer día sin que mis ojos derramaran lagrimas, me sentía totalmente sola y los extrañaba, los extraño aun y el vacio aun esta aquí, pero creo que es lo que al mismo tiempo me mantiene con vida, la ilusión de que los volveré a ver en unos meses mas si Dios me lo permite.
