Pisando una nueva etapa estaba mi yo. Suspirando y imaginando momentos del que viviría para siempre.
Con la mente en alto y las manos en su vientre, miraba las estrellas junto a él. El la abrazaba por la espalda y le decía cuanto la quería.
El.
Aquella persona que se colo a su vida como nadie lo había hecho y le dio un giro de 360 grados a su mundo para no volver.
Y no volvería, porque ahora estaba con ellos.
Ahora serían 3, en una historia que recién comenzaba. En una historia que había comenzado hace tiempo y ella no lo sabía.
El destino, la sorprendió para seguir, para juntar fuerzas y seguir otro rumbo, aquel que una vez imagino y hoy estaba cruzando...
El pasado se alejó de un tirón y el mundo se unió. Los dias dejaron de ser parejos y vacíos, porque ahora ella estába completa.
Despertó con lágrimas en los ojos y lloro, soltó el pasado, soltó aquellas personas que unas vez la hundieron para llegar a la meta ilesa... porque ahora no estaba sola. Ahora no se trataba de ella sola , porque...
Ahora serían tres.
Como la noche, la luna y las estrellas.
¡Amor de tres!