Son días oscuros
para los Corazones Negros.
El que una vez tuvo un sueño,
ahora duerme...
en el Silencio Eterno.
La luz que representaba
arde ahora con ira en las calles.
Pero no guía ni calienta,
no inspira ni alienta,
ni al espíritu alimenta.
Sueños con alas de plomo
caen pesadamente...
como lágrimas de impotencia
por las caras de la gente
que contra la autoridad arremete.
Cuellos blancos
en oscuros movimientos.
Manos blancas
manchadas de sangre.
Nunca culpables...
Amanecer oscuro
para los Corazones Negros.
El Rey ha caído
y, en desesperación,
se desmorona su reino.
El que una vez tuvo un sueño
ahora duerme...
en el Silencio Eterno.
Pero en su pueblo se despierta
la esperanza, la ilusión...
Un nuevo vuelo...
