Érase una vez un mundo que no existía
Lleno de personas irreales,
Pensamientos confusos
Esperanzas de mentira.
Lleno de sonrisas frías
Y de llantos falsos.
Un mundo ilumindo por un sol agonizante,
Cubierto por un manto de desolación.
Era un mundo alimentado por el desastre,
Enriquecido con tristeza
Era un mundo seco y gris
Ése era el mundo en el que vivía.
En ése mundo la sed no la calmaba el agua
Sino las lágrimas del otro.
Era un mundo cruel y frío.
Ése fue el mundo en que mis ancestros vivieron.
Es un mundo que cada vez se hunde más,
Que va perdiendo su escencia día a día.
Es un mundo fantasmagórico y gris.
En el que mi descendecia deberá vivir.
Es un mundo al que no le quedan esperanzas,
En el que todos son esclavos de la maldad.
Es un mundo falso y frío
Ese es el mundo en el que estoy condenado a vivir.