Querida Guerra!
31 de enero de 2016
por andream911
Los tormentos de una guerra, que en silencio me queman
Las balas frías por los aires, que al caminar rozan mi paso
Y en mi oreja el percutir de una metralleta, que ensordece mis latidos
La sangre que corre como río, el olor de muerte que baña mis sentidos
La vida que existió, el ser que se olvido y la muerte se llevo,
aquel que murió lentamente en manos de un enemigo que alguna vez llamo hermano.
La vida se escapo en un suspiro, que abandono mi alma, dejando ir mi espíritu.
Corrí con el corazón en la mano, como una granada que presionaba en lo que es y lo que será… Solo una guerra, solo un adiós, solo un soldado, solo un hermano, solo un humano…
El sonido de las balas, el estruendo del cañón
Las bombas de aquel avión, que en mis ojos se perdió
Ya no nos percatamos de que perdemos más de lo que ganamos
Y no nos fijamos de aquel niño que lloro, porque a su madre perdió
De aquel padre que lucho en una guerra a la que no perteneció
De aquella madre que su vida dio por no dejar el hogar que con mucho esfuerzo construyo…
La vida que se perdió en esta guerra que no acabo, en donde la muerte amparo y en sus brazos acogió
Que mentira tan perfecta, que verdad tan infinita
Que dolor tan intenso, esa bala me alcanzo
Me ha dado en el pecho y ahí se alojo
La sangre desbordaba y el pulso se alteraba
El frío me congelaba y mis manos colapsaban
Que ha sucedido? esta guerra me llevo
Cariño que pasó, esta guerra no término, tus recuerdos enterré en mi herido corazón
Esta guerra no era mía, y destruiste a tu paso, lo que alguna vez llame hogar…
La vida que vivió en esta guerra que acabo
Las balas, el cañón, el sonido de aquel avión, los gritos de desesperación
La muerte de un señor, la madre que sufrió porque a su hijo enterró
Solo dime que paso, esta guerra no acabo
Querida Guerra! que sucedió? yo no quería esto, y ahora mi patria murió…
2 Recomendaciones
Siglo Xxi1383 lecturas, 4 comentarios, 3 lo recomiendan
Has sabido plasmar de una hermosa manera, los clamores, los sonidos, los temores, los dolores y toda la sinrazón que habita en el monstruo de la guerra, pues sin duda una guerra necesita para alimentarse de todas esas cosas y también de la colaboración de todos los ciudadanos del mundo, que no vemos nada y todo lo callamos. En el fondo todos somos culpables, de todas las guerras que nos son contemporáneas.
Un buen texto.
Un saludo.