Largo poema escrito a mano en el fondo de mi bolsillo
con palabras que no significa nada cuando no fueron requeridas.
Chicos buenos, con suerte ellos serán pacientes por un amante.
Los versos que una vez soñé etéreos, se ciernen por el filtro en mi ventana.
Tan sólo dos días mis demonios se alejaron,
pero quedaron alojados en la cajuela de su coche.
Las notas de su piano ahora tocan una marcha funebre
Chopin podría estar orgulloso.
Esos monstrous posiblemente lucirán como yo.
II
Tuvimos una historia corta.
Cuan larga y corta historia
sellada en mis pulmones.
Chicos, chicas, pianos, risas
todo se queda en la parada
de algún tren.
Cállame, abrazame,
no me dejes arruinarlo
por tercera vez.
¿Podría tan sólo escucharme?
Alguna vez fue el único
en escuchar cuando termine de hablar.
Tuvimos una historia corta.
Cuan larga y corta historia
sellada en mis pulmones.
III
Retrocedió por las vías de aquel tren
y nos encontramos en días cuando mi voz trémula
te hacía sonreír.
Tus manos; una en el volante y la otra en mi mano.
Los demonios en su cajuela
se morían por salir y, cariño, sólo tú poseías las llaves del cerrojo.
Nos llevaste fuera del camino
y ese último abrazo arranco el sello de mis pulmones.
Llegué a casa con pulmones desechos
y apenas se podría respirar.
Lo vuelvo todo una tormenta
intentando encontrar aire otra vez...
A veces no comento porque no se me ocurre nada, ahora solo puedo decir que ha sido precioso y que me ha encantado. Lo sé,no es original, pero es lo único que se me ocurre decir. Hermoso.
Saludos!
