La haba cagado. Todo el curso esperando ese momento, y lo haba echado todo a perder.
Aquel bochornoso da de junio haban tenido el examen final de tecnologa. La ltima oportunidad de no pasar todo el verano estudiando para los pocos que an no haban conseguido aprobar. Volvan juntos a casa por el mismo camino y, por primera vez en todo el ao, lo hacan solos. l, nervioso, buscaba las palabras, los gestos, la mirada que la haran decir s. Y mientras lo haca, negras nubes cegaron el cielo.
El aguacero les pill en medio de ninguna parte. Corrieron hasta encontrar un soportal donde refugiarse. Dejaron los libros en el suelo y vieron la lluvia caer. Ella tembl a su lado, y l la mir. Calada hasta los huesos, sus dientes hicieron un ruidito divertido cuando comenzaron a castaetear, y l se qued en blanco al ver lo guapa y vulnerable que pareca, con su pelo mojado enmarcando su dulce cara. Y entonces sus ojos le traicionaron y bajaron demasiado, hasta la camiseta blanca que, empapada, se pegaba a su cuerpo y trasluca descarada dos areolas pequeas y oscuras.
No saba si haban pasado dos segundos o dos horas, pero de pronto fue consciente de que ella se haba dado cuenta de su desliz. Volvi a mirar a la calle, a la lluvia, a ninguna parte, mientras notaba que se pona colorado y le entraban ganas de partirse la cabeza contra la pared por haberla cagado en el ltimo momento.
Pero entonces ella sonri
Alpana, junio 2011
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Ja jajajaaa... las tetillas primeras...! muy bueno! ya después aprendemos a cagarla mucho mas en serio! te seguiré leyendo!!!