Indigo
Hola Alpana, buena tu iniciativa pero estoy del otro lado del Atlántico. No obstante, me uno a tu iniciativa en TT y dejo lo mío aquí.
Saludos amigo.
Los años habían pasado lánguidos, todavía existía ese hermoso rastro del amor que fue.
Llegué al hospital, piso 5º, sala 20. Allí yace; me acerco impresionado y entre oscuras lágrimas, entreabre su boca hueca, despoblada y de verde encía. Ella intenta pronunciar alguna palabra y solo escucho un gutural sonido de aquellos labios otrora carnosos, de sensual escarlata que con tanto placer besaron mi sexo, mi cuerpo y solo acierta mostrar una mueca agrietada, violácea.
Extiende su diestra y con horror contemplo la pérdida de cuatro dedos, el cáncer avanzó sin misericordia. La escena y el hedor son insoportables, vomito y una enfermera me auxilia.
Me brota de lo más hondo un llanto y me marcho con un adiós a sabiendas del desenlace próximo.
21/09/14 04:09