Pesadilla
Desperté, otra vez, sin ganas de hacer nada,
el móvil vacío, sin alguna llamada,
me paso, entonces, las tardes reo en la sala,
alejado kilómetros de aquel amor que murió en mi cama.
Me duelen los pies de caminar sobre mis propias mentiras,
prefiero mentirme a oír las verdades que me digas,
que todo fue un juego, y ganaste la partida,
que soy yo el imbécil del corazón y alma partida...
¿Dónde están los besos y las promesas que decías?
Tantos momentos calientes para terminar tan fría...
Te llevo en la mente diciendo que me querías,
y yo me lo creí, ¿Quién lo diría?
Que lo que me daría vida, luego me mataría,
de ser almas gemelas, a ser la noche y el día,
ahora la pesadilla de una dulce fantasía,
ahora lo que más duele, antes lo que más quería...
He agotado mi alma entera con este tema,
tengo miedo de escribir de amor, aún me quema,
y, ardido, te escribo otra vez, como un alma en pena,
condenado a escribir, escribir para ella.
Como la vida, el amor es un juego,
vas para perder, y pierdes más de lo que recibes luego,
recordando besos que arden como el fuego,
para terminar siendo ceniza olvidada en un cenicero.
Sentado en la cama, clase, y en el bar, no paro de imaginar,
¿Cómo estarás? No dejo de pensar,
¿Pensar nunca es bueno? Por eso intento tomar...
¿Cómo estaría guay verte, volverte a besar?
[3:41]
Duele, porque por un instante creí que hoy volvió,
porqué soñé que, por fín todo fue a mejor...
pero solo fué un sueño, nada más,
la realidad, por eso, es una obra infernal,
Quisiera, un día, verte enfrente de mí otra vez,
está la cama, y los parágrafos vacíos sin ti,
recuerdo tu carita hermosa, y no sé que hacer,
espero que, al menos, te vaya a bien...
Dios, dame fuerza, me quiero rendir,
Dios, dame fuerza, tengo la sensación de que ya perdí,
Sigo parado, esperando a que ella diga algo...
¿Se acordará de mí? Lo estoy dudando.
Dudo también si ella alguna vez me amó...
-Joder, no pienses tanto,
¡Claro que ella te amó!
seguro que solo fue un colapso...
Su alma volverá a brillar,
y su corazón dulce a amar,
solo que, esta vez, ya no a ti,
pero, lo importante es que sea feliz...
-¿Y qué será de mí?
yo sigo aquí...
yo también quiero ser feliz,
y no tener tu amor por cicatriz.
No sabes cuánto te llego a extrañar,
como de menos te puedo llegar a echar,
ahora que te has llegado a marchar,
incluso cuando río, en el fondo, solo quiero llorar...
Dime, que esto es una pesadilla,
que, al final del día volveré a despertar,
que estos meses fueron una broma de pacotilla,
y que mañana te podré volver a besar...
Que no me he roto a llorar por las noches, en la madrugada,
que nos amamos, todo es real, no ha dolido nada,
y sobre todo, que no te fuíste...
Por favor, que el siguiente despertar no sea tan triste...
