una rosa que no muestra sus petalos, sus ezpinas te sangran al tacto, sangre en forma lagrimas, empesando por de los dedo las llemas, hasta obligarte a cortarte las venas
en la noche te sabe a amor en la mañana se convierte puro dolor que no se olvida ni con alcohol
la rosa que me hiere tiene tu nombre tu querias oro solo te pude dar cobre y amor del buen