Yo tengo
el pelo negro,
como la oscuridad
tiene a la noche,
En donde
estrellas
de adorno,
se incrustan
y relucen
para ser vistas
en el momento.
Tengo el cielo
por sombrero,
y como el agua
corro al encuentro,
a ese mar
que me ofreces
siempre de felicidad
abierto.
Tengo la mano
en la suerte,
Tengo,
Siempre lo que
invento...,
Tengo escondido
nuestro santuario,
Lo tengo;
Solo para
que
tu y yo,
con el amor
Lo veneremos...
"Tengo escondido
nuestro santuario,
Lo tengo;
Solo para
que
tu y yo,
con el amor
Lo veneremos..."
Estimada Creatividad...solo quienes han tenido la dicha de conocer el amor de verdad, pueden escribir unos versos así.
Un saludo muy cordial.