Seré yo ese audaz que te colme de frases bellas,
será para mi un honor hablarle, bendecirla, cortejarla,
cada día será un desafío el como conquistarla,
seré su confidente para ganarme su confianza,
Me propondré seducir tu corazón con poemas tiernos,
que como un collar al cuello, se aten a tu alma,
Seré guardián fiel de tu celestial calma,
cuando la inseguridad se encuentre al acecho.
Me aseguraré que su copa de felicidad este llena.
en el gran desierto de las decepciones,
trataré de comprender sus razones,
apagaré el fuego que quema sus penas.
Romperé todo tipo de recias cadenas,
que la mantengan atada al dolor,
recordaré siempre la hermosura y olor,
de tu pelo suelto y perfumado a la luz de la luna.
Será para mí, eterna dicha y fortuna,
enamorarla cada día en mi vida,
solo asegúrese usted de darme cabida,
en su mente, y en su alma.
