Llegué con la estructura ósea hecha un juego de rompecabezas. Me tendí en las frazadas negras de mi departamento gris y cerré los ojos hasta quedarme dormido.
Soñé con princesas.
Estaban todas desnudas y tenian el mismo rostro. Se me arrimaban a la piel y me acaricibian cada musculo de mi cuerpo. La sangre corria caliente por mi cuerpo hasta que estallé en litros de marea roja.
Desperté con miedo. Me sentía indefenso. Era ya tarde y afuera no se escuchaba mas que los reactores y mecanismos sucios de la energía barata que nos mantienen vivo.
Las pesadillas me impiden llenarme del jugo pecaminoso sin sentir un corte rapido de dolor cual me arranca del sueño.
El coito onírico inicia sutil como un secreto y luego acaba con un orgasmo literalmente "de miedo".

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7 Comentarios

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  Forloren

  se uqe he estado un poco "antisocial" respecto a los comentarios y lo lamento, han sido semanas escandalosas y cansadoras.
  
  besos y abrazos

  03/08/08 08:08

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  Abyssos

  Hay muchos tipos de orgasmo, el miedo es uno de ellos, esta el del placer, el del amor, el del dolor. No hay escape, una vez que comienza el cortejo erotico de los tormentos de nuestra mente, no se puede dormir de nuevo sin despertar con miedo.
  
  Saludos, buen escrito.

  03/08/08 08:08

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  Jorge

  El problema de los sue?os, es que el ?xtasis siempre parece mudarse inoportunamente.
  Saludos...

  03/08/08 08:08

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  Mejorana

  Este cuento m?gico no se puede comentar con prisas.
  Se ha de saborear y despu?s decir lo que sea.
  Tendr? que volver a leerlo en otro momento

  03/08/08 09:08

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  Alguien

  si

  04/08/08 02:08

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  Liz

  Cosa de sue?os...o pesadillas...
  exquisitamente incontrolable.
  Interesante texto, amigo coterraneo...desde el mismo fin de mundo...te saludo.

  08/08/08 06:08

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  Mejorana

  Lo he l?do de segundas.
  Un relato inquietante y misterioso.
  Al menos para m?.
  
  

  10/08/08 08:08