Sé que llorar no soluciona el daño que se causa, ni borra las palabras dichas.
Sé que llorar no te hará sonreír... Pero aún así lo hago.
Porque no sé qué mierda hago para que acabemos siempre discutiendo, los 2 mal, fastidiados, llorando cada uno en su mitad.
Ojalá tuviésemos un todo en el que perdernos y no dejarnos encontrar jamás; uno en el que la gente falsa no exista, en el que no se hayan inventado los problemas... Un mundo nuestro.
Porque pese a los bajos de esta montaña rusa, me encantan los altos, y me da igual si tengo que bajar mil veces porque sé que volveré a subir, porque sé que si no subo muero.
Que me da igual que me acabes odiando en unos días, me da igual porque yo te querré aunque me mates.
Me da igual que llueva, nieve o haga sol, lo que quiero es estar contigo.
No nos vemos nunca, pero, ¿sabes? Me da igual. Porque sé que te tengo, que me conectaré y tendré miles de notificaciones tuyas, un "mi niña" saludándome, lleno de ternura...
Porque me encanta que mi sonrisa provoque la tuya, me encanta construir sueños de aire, me encanta soñar contigo y me encanta el número 29.
¿Exagero? No creo.
¿O a ti no te pasa?
En días puede cambiarse la vida de un ser humano y he aquí la prueba de ello.
No sabría qué hacer sin ti durante un día, sería completamente horrible.
Pensar en perderte mata, ¿lo sabías? Pensar en perderte es como fumar. Contamina. Fulmina.
No quiero volver a estar vacía, no quiero estar sin ti...
