Tormento.
Tres días tratando de reunir las palabras correctas para decirte que hemos acabado, te escribo desde la rabia, desde mi lugar parada mirando tu espalda cada vez que te vas y no volteas para saber si sigo en píe o he desaparecido.
Mira que lo de gritarnos los defectos a las caras me ha restado de a poco lo que sentía por ti y he comprendido lo poco que te necesito para ser feliz.
Me he entregado al calendario marcando más días de tristeza que de felicidad y la noche me ha pedido que salga a bailar diciéndome que el amor no es esto y mira que bonita me veo al espejo cuando no estas cerca robándome la sonrisa.