Acéptame
I.3
Sé que temes al mañana
que se te va de las manos
y que tejes tu maraña
para verme reventado.
Comprende por favor, padre,
la guerra puede acabar,
solo las habría virtuales
bien dentro de mis entrañas.
Entiendo bien los motivos
que mueven a mis verdugos,
pero lo tengo previsto,
nunca bajaré mis muros.
He desplegado mis piezas,
no podrás entorpecerme;
he conseguido la influencia
el tesoro de los reyes.