Períco de los Palotes quería despericopalotizarse. Vaciarse de su periquez, desprenderse de su palotismo.
Períco de los Palotes debió examinarse a sí mismo, a su historia a su cultura, y a todas las lineas de afiliación que lo pericopalotizaban.
Se dio cuenta del dolor del Pachakuti. Años después, habiendo logrado su despericopalotización, nadie lo volvió a ver.
Quisiera creer que aquel que salió por la puerta, más allá de la frontera, hoy está pleno de dicha. Pero quién sabe. Tendría uno que salir a buscarlo para saberlo con certeza.
Pero ¿quién querría seguir sus despericopalotizantes pasos?