Veinte Años Después. - Laredaccion

Veinte Años Después. 22 de febrero de 2012

por laredaccion

Fue la noche del sábado propicia para el reencuentro con viejos amigos. Ella llegó acompañada por su nueva pareja, un hombre correcto, que abandonó con amabilidad fingida el local después de dos cervezas, incómodo y visiblemente aislado por los más de veinte años de complicidad de nuestro grupo. Ella se alegró de su marcha y lo celebró como quien recupera la libertad perdida.

Tiempo de confidencias en la barra de un bar; palabras de abandono, de desamor... Cuando su voz se quebró por segunda vez, comprendí que en ese momento lo que más necesitaba era el calor de un abrazo. La abracé, y el contacto de los cuerpos nos hizo invisibles. Un minuto después nos besábamos atropelladamente con la pasión de los adultos; nos besamos sedientos, con el interés de los besos adolescentes; con delicadeza, con la ternura vergonzosa con la que besan los niños; nos besamos y nos abrazamos el alma y la piel con el deseo impetuoso de una primera y última vez, queriendo retener la noche junto a nosotros, ajenos a todo lo demás.

Eres un volcán de trigo...
Adulador, ¿a cuántas rubias has dicho eso?
Solo a ti; nunca había acariciado un pelo tan fino, casi gaseoso, como el brillo de una aurora.
Ay, estos poetas... ¡Ven aquí, cuentista!

La avanzada mañana nos devolvió a la realidad incómoda y apremiante. En el descansillo de las escaleras rompimos el abrazo que nos había mantenido unidos toda la noche; la esperaba un automóvil con el motor encendido.

Niña, yo...
No, no hables ahora. No me arrepiento de nada, ha sido precioso.
Gracias, cielo, es todo lo que necesitaba escuchar.

Desde la terraza de la casa de la amiga común que nos dio resguardo la vi acercarse al coche y saludar con frialdad a su conductor; pero antes de acomodarse en su interior levantó la vista, y al verme asomado, me regaló una sonrisa mezcla de resignación y de tristeza; seguíamos abrazados.

©EFG/la redacción. Febrero 2012.

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16 Comentarios

Me dejo un regustillo amargo peroo siempre queda el recuerdo de ese eterno abrazo. Saludos Esteban

Libelle

22/02/12 02:02

Al igual que Libelle, palabra por palabra
Un abrazo

Antonio

Buitrago

22/02/12 03:02

LIBELLE
Así es, amiga, regustillo amargo para un hermoso recuerdo.
Un beso.

ANTONIO, pues eso, palabra por palabra, jeje
Un abrazo.

HEYLEL
Sí, podía haber inventado diálogos grandilocuentes para ensalzar el relatillo, pero he preferido mantener los originales. Muchas personas hablan así en la vida real y no por ello dejan de vivir situaciones románticas, que no son ninguna parodia ¿no crees?
Gracias por la visita y comentario.
Un cordial saludo

Laredaccion

22/02/12 03:02

Ay, el intento de recuperar lo que se ha ido. Funciona casi siempre, al menos unas horas. Luego la realidad, a menudo triste, se hace presente. Enhorabuena, me ha gustado mucho

Beth

22/02/12 06:02

Esteban ¿a que sabes lo que voy a decirte?
Que sabes escribir como nadie. Y por cierto, que el amor lo único que quizá tenga de superficial sean las palabras para expresarlo. Porque no he visto a nadie que en la intimidad de un beso desarrolle una ecuación matemática, creo, vamos.

En cualquier caso, felicidades, y no creas que no existen esos reencuentros en la realidad.
Besos.

Asun

22/02/12 07:02

BETH
Gracias Beth, a veces las relaciones humanas son complejas. Me alegra que te haya gustado.
Un beso.

ASUN
Pues no, no sabía lo que dirías jajaja. pero gracias por el piropo, eres demasiado generosa.
Ya sabes que la realidad siempre supera a la ficción.
Besos.

Laredaccion

22/02/12 08:02

SETE
Bueno, pues si te parece romántico ya es algo, pero no me ha quedado muy claro si te ha gustado o no...
Besos.

Laredaccion

22/02/12 08:02

A mi sí que me ha gustado. Y chaval... no nos tienes que demostrar nada, ya lo haces en cada una de tus Creaciones, así con mayúsculas porque son (y supongo que no me equivoco y todos estarán de acuerdo) Geniales...
Esteban... claro que es romántico... romántico-cotidiano, natural. El extracto de un momento, sencillo... sin más, que nadie como tú sabe "esenciar".
Nos tienes acostumbrados a deleitarnos con tu prosa-rica ... fresca, original. Nos conmueven tus poemas deliciosos. Nos sorprendes con sonetos imposibles... narraciones con una carga de sentimientos que hacemos nuestros y emocionan cuando se leen.... Esto, simplemente es... bonito. Podría ser "el momento" de cada uno de los que te leemos en un encuentro similar. Porque yo, como dice Asun, en un momento así, ni ecuaciones matemáticas, ni me pongo a declamar a Antiparto de Sidón, Parménides de Elea, Safo de Mitilene... y ni siquiera a Leónidas de Alejandría que por lo visto eran buenísimos en lo suyo... jajajajajaja... hay gente que por lo visto sí... pero bueno.
Ya has dejado clarito, lo que eres capaz de hacer... un Besote.

Jandri

22/02/12 09:02

Todos hemos vivido situaciones parecidas. Y sí, son situaciones románticas, tal vez tontorronas, pero cómo las hecho de menos, a veces.
Tu relato me trae al magín recuerdos de éste tipo, por eso me gusta.
un saludo

Miguelito

22/02/12 10:02

Un texto lleno de humanidad, que se mueve entre lo que podemos y lo que nos gustaría hacer.

Es original y técnicamente muy cuidado, marca de la casa, por otra parte.

Debo decir que me ha gustado mucho.

Un saludo.

Fernandoj

23/02/12 12:02

Dicen que donde hubo fuego, las ascuas quedan ... Creo que en el fondo de todos está siempre ese deseo de revivir momentos inolvidables, aunque no conduzcan a nada, y aunque no puedan salvarse los espacios y los tiempos que ya han pasado.
Pero la vida se compone de instantes, y hay impulsos que nos impele a vivirlos ...
Me parece un texto muy auténtico, muy verosímil ... Y yo diría que más que romántico, es la vida misma.
Muy bien contado, con sensibilidad.
Un gran abrazo.

Danae

23/02/12 10:02

JANDRI
¡Madre mía!, qué pedazo de comentario; así es imposible plantearse el dejar de escribir ni por un momento. Gracias, amigo, eres muy generoso.
La historia, como tú muy bien dices está "esenciada", y me encanta que te parezca todas esas cosas que dices.
Buen repaso a los clásicos, niño...
Un abrazo

MIGUELITO
Pues si te trae recuerdos y te gusta yo me siento muy honrado. Muchas gracias.
Un abrazo.

HEYLEL
No tienes que disculparte por nada, y gracias de nuevo por pasar.

FERNANDO
Los deseos y la realidad, casi siempre enfrentados.
Gracias por el comentario, un placer que te guste la idea y la técnica empleada. Un saludo cordial.

DANAE
También se podría decir que la vida misma te regala momentos románticos, y solo sean eso que tú dices, momentos, aunque no conduzcan a ningún sitio, solo a vivirlos.
Gracia, amiga, por pasarte y dejar tus impresiones.
Un beso.
Esteban.

Laredaccion

24/02/12 09:02

nada de lo que he escrito se compara con vosotros...

Delofe

28/02/12 01:02

Los díálogos que tenemos en la vida real son atropellados por los sentimientos que en ese momento nos invaden, tal vez se puedan pulir pero no sería tan reales.
Genial como siempre.
Un abrazo.