Cabalgando Sobre Los Muertos
¿Eres tú el fantasma que cabalga?
¿Eres tú jinete o eres tú amazona?
Yaciste con mi madre.
Ya no vives conmigo en la casa del ayer.
Ni en este mundo, me arrojasteis como un perro deshuesado; un actor suplente.
Soy la que cabalga entre tormentas.
Hay un asesino entre la lluvia,
si, mi cerebro se retuerce como una
rana, en el vientre de una serpiente.
Todos me dicen que hay paraíso, procrea,
deja que tus hijos jueguen, al juego de la vida, que miren al cielo a las estrellas,
todas ellas tienen una razón para existir,
también para morir, me he enamorado de una mujer del firmamento, junto a ella cabalgo y tengo la necesidad de ella.
Si le das un aventón a esa mujer, la hermosa familia crecerá y morirá.
Asesinos de voluntades, voy a dar a luz un muerto, niña de las tormentas, morirás en una gota de agua regando el desierto.
Si, Mujer, debes amar a tu lesbos.
Hombre, debes amar a tu huomo.
Procrea, yace en su vientre.
Toma su mano,
hazle entender,
que el mundo depende de ti, nuestra vida empieza en el placer.
Debes amar a tu madre, yo te amo a ti linda, mi hermosa jinete de las tormentas,
nuestros senos fundidos alimentan el rayo
que teme el sonido del mundo.
Sagitarias en el estruendo.
Gemidos en la carrera de lluvia.
En el arcoíris nacimos.
En este universo están nuestros desechos.
Como los soles cuando implosionan,
dejan la escoria del gas.
Jinetes en la voluntad cabalgando sobre las lápidas de los cementerios.
Sus guadañas rasgan las cruces, dejando huesos sólo conocidos por dios.
Sube a mi yegua desnuda, seamos sólo hembras cabalgando entre tormentas, sólo mujeres amando mujeres, las nubes serán nuestro lecho amor.
Al morir la lluvia caerá en campo santo,
muertas,no somos diferente al polvo.
Te conocí cabalgando entre tumbas,
todo vuelve a repetirse, la muerte, es nuestro hogar.
