Estáis Muertos Pero No Lo Sabéis

Qué exequias más hermosas, qué gentío,
cuántas flores y sombras, cuánta pena,
con su mutis quedó sola la escena,
cuántas hojas caídas sin rocío.

Qué silencio en las voces, y qué frío
por el amigo muerto. Gime llena
de angustia el alma por el alma buena,
cómo me dueles, humanidad desierta.

La amistad y el amor están presentes,
la pluma y el talento están de luto,
nieblas hay en los ojos, en las frentes.

Muere lentamente quien está estanco
quien no interpreta palabras
quien no no conoce pentagramas
quien no encuentra gracia en sí mismo.

Muere lentamente
quien destruye su amor propio,
quien no se deja ayudar.

Muere lentamente quien se transforma en esclavo del hábito
repitiendo todos los días los mismos trayectos,
quien no lucha contra ley preestablecida
quien no se atreve a cambiar el color de sus harapos, jubones traidores que vende tras la provincia de las especias, estáis todos muertos y no lo sabéis .

Y pienso al ver el fúnebre ajetreo
que por razones de mi ceño hirsuto
pues esa lesa humanidad no es consciente que esta muerta y cada día mueren en sus escénicas mentiras afueras de soliloquios de podredumbre
no irá a mi entierro nadie, ni yo, creo.