Me miras y me dices que no me quieres, pero esa forzada seriedad esboza una sonrisa en tus ojos. Tus labios me mienten pero tu mirada nunca me engaña. El brillo de tus pupilas te delatan y confiesan que existe una luz en tu corazón, tenue tal vez, pero no cabe duda de que es visible.
Tu intención es mostrarme un oscuro corazón, frió, tenaz, pero eso solo es una fachada manipulada cuidadosamente para hacerme creer que amas a otro, o que simplemente no amas.
Que absurda falsedad hacerme creer que no eres capaz de amar, ¿acaso existe alguna persona que no ame? Todos amamos, algunos mas y otros menos pero todos lo hacemos. Y tu querida, me amas como la que mas cuando me dices que no me quieres, ya que me estas alejando del dolor, pues tu amor me duele.