Soy tantas veces
lo que no quiero ser
que resulto aburrido
y hasta mi sombra
bosteza en esos días
por esa sensación de despedida
que reflejo.
Hoy amaneció acatarrada
han sido varios
despertares
llenos de letras frías
y de exponerla
a corrientes al abrir
mi nevera moribunda
de forma reiterada.
Soy tantas veces
demasiado fantasmal
e incierto
que me paso.
Aunque siempre me sorprende
mi ironía
como el regalarle flores
a mi sombra
costipada y aburrida
en el día menos indicado
para hacerlo
un lunes
al no tener ni olfato
y usar desde el domingo
por la tarde
como yo
unas gafas negras.
Pero a decir verdad
le tengo mucho afecto
por su fidelidad
a toda prueba.
Nunca me dice nada
de lo fenomenal
que creen que soy
ni tampoco el desastre
que ella sabe.
Le caigo bien
o al menos eso creo
y tiene ya la pobre
fiebre y tan mala cara..
las merece!
si es que los lunes
encuentro una floristeria
que no esté cerrada
o soy capaz de encontrar
para salir de casa
la llave de mi puerta.
Carlos
(Tose mi sombra).