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Mi Día.

Hoy, no os voy a contar nada en especial. Tan solo voy a describiros como ha sido el transcurso de mi día de ayer. Se que seguramente no os interesará, pero me da igual. Me apetece escribirlo y publicarlo, simplemente porque sí.
Pues esta mañana, aunque tenía programado que el despertador sonara a las siete y media, me he despertado a las seis y media. Bueno, la verdad no sabía que hora era, y por ero fui a buscar mi móvil para ver la hora. Pero no estaba donde lo dejo todas las noches, y creyendo que me habría quedado dormida hablando por él, me dispuse a buscarle entre las sábanas. No encendí la luz, me daba demasiada pereza ir hasta la pared opuesta de la habitación. Después de cinco minutos buscando inultilmente por la cama, cojí el despertador y, pulsando el botocito de la luz, lo busque por el suelo (también aproveché para mirar la hora). Cuando ya daba por perdido mi móvil, se me ocurrió la fabulosa idea de que estuviera debajo de la cama. Asique a las siete menos cuarto de la mañana, con una linterna en la mano, yo estaba retirando la cama (que no es que pese poco) en busca de mi móvil perdido. Efectivamente, allí estaba el móvil, descansando debajo de mi cama de cara al suelo. Por suerte, no se rompió la pantalla, esa es una muy buena característica de mi móvil porque a pesar de las veces que se me ha caído de cara al suelo, lleva dos añoa funcionando y sin rozaduras.
*Quería hacer un intermedio para agradecer a las personas que han llegado hasta aquí leyendo, aunque sea por aburrimiento.
Terminada esta tarea y con el movil en la mano, intacto, le he encendido y he visto que tenía seis "wasaps" sin leer. Todos de la misma persona. Los he leído pero me he privado de responder todavía, pues no eran horas. Así me he vuelto a quedar dormida durante media hora más, hasta que el despertador ha cumplido con su función. Le he apagado de un manotazo, y, a diferencia de otrad veces, enseguida me he puesto unos calcetines y me he levantado a encender la luz. Desde aqui ya os podéis imaginas que he hecho: vestirme, desayunar, arreglarme... El caso es que he tardado menos tiempo de lo habitual y a las ocho ya estaba preparada. He aprovechado para pedir disculpas a esa persona por quedarme dormida anoche y he hecho la mochila, que anoche me dió pareza hacerla. A las ocho y veinte estaba ya finalmente en la calle, esperando a mis compañeros con la mochila a cuestas. Ni un alma habitaba las calles y se escuchaba un silencio magistral hasta que llegaron el resto de personas. Paso a paso, con calma, llegamos a la puerta del instituto justo cuando estana sonando el timbre. Entramos y nos despedimos, cada uno llendo a su clase. Yo tenía física y química a la primera hora y la verdad que no me apetecía nada. Nos sentamos y empezamos con la clase pero, como de costumbre, todos nos olvidamos de donde estábamos y empezamos a hacer caso omiso a la profesora. Las consecuencias no fueron buenas pues dio la lección por explicada. La verdad que no es la primera vez que nos pasa esta semana, pues llevamos ya seis profesores a los que hemos conseguido consumir la paciencia. Justo después teníamos tutoría, y como la semana pasada fueron las evaluaciones, vino a "comentarnos las quejas" de los profesores. Decidimos que teníamos que hacer cambios de sitio, asique después de mucho hablarlo, conseguimos distribuirnos por la clase.
*¿Os está gustando mi día? Se que no tiene nada de interesante, un día normal pero ya he dicho que me apetecía relatarlo. Gracías a los que me hayan aguantado hasta aquí. Sigo.
El caso es que yo ahora estoy en primera fila, a buena vista del profesor/a. La siguiente clase, la de lengua, estubo muy bien. Con el cambio de sitios todos funcionabamos bien y lo más milagroso: en silencio. A continuación tuvimos el recreo, que a mi se me hizo más largo que de costumbre, al contrario que las tres primeras horas que se me pasaron volando. Acabo el recreo, y nosotros teníamos clase de plástica. Primero teníamos que subir a nuestro aula, buscar a un profesor que nos abriera la puerta, cojer las mochilas y volver a bajar a la planta baja hasta el aula de plástica. Hecho el recorrido, nos sentamos en nuestros pupitres. En realidad, yo me sente en primera fila, en la que en dos mesas estabamos tres alumnos, pero al profesor pareció darle igual. Perdimos la primera mitad de la clase en hablar sobre las maquetas que le hicimos a la de biología y que pasaron a ser propiedad de él. En los veinte ultimos minutos que quedaban de clase, dimos algo de dibujo técnico, entre regañadientes. Bueno, me falta mencionar que yo le enseñe un dibujo (que había hecho en la clase de geografía del día anterior), y que le gusto tanto que me dijo que le guardase, que le dibujaríamos en una pared del instituto para adornarle. Acabó la clase y subimos a nuestro aula a dar matemáticas, aunque aquí la distribución de la clase no funcionó y perdimos la primera mitad de la hora en hablar sobre el concurso de matemáticas del día anterior, hablar sobre el boli de regalo que nos dieron, y haciendo tonterías. Finalmnte la profesora se cansó y nos pusimos a corregir ejercicios. Los últimos diez minutod de la clase jugamos a un juego matemático, yo gané cuatro positivos. Y ya la última hora: música. Sin duda, esta hora es la que más me ha gustado de todas. Hemos ido al aula de música y nos hemos sentado (en esta clase las mesas están colocadas en forma de "U". Como faltaban varias personas, por causas no justificadas, la profesora decidió hacernos un "exámen sorpresa". Este exámen constaba de ocho preguntas, tan simples que hasta un niño de cuatro años sabría contestarlas. Las preguntas eran del tipo: tu nombre, tus apellidos, la fecha, el nombre de la profesora.... Solo quería dar un pequeño escarmiento a aquellos que se fueron de pellas, y me parece muy bien. Perdimos mas de cuarto de hora en conseguir que el caset funcionara. La hicieron una llamada a la profe que tuvo que responder, y curiosamente justo cuando colgó empezó a sonar la quinta sinfonía de Beethoven. El resto de la clase la pasamos escuchando una y otra vez, con los ojos cerrados, esta maravillosa música y analizandola poco a poco. Cuando termimó la clase recorrimos la misma trayectoria que esta mañana pero en sentido opuesto, entre bromas y cosquillas, hasta llegar a nuestrad casas. Comí rápidamente y me fuí a mi habitacion, donde cojí el móvil y esperé a que llegasen las 16:30. Justo a esa hora, estaba esperando en la plaza donde quedamos a mis amigos. Fui la primera en llegar, pero no estaba sola. Dos chicos y una chica estaban paseando a un cachorrito, un husky siberiano (creo que se dice asi). La verdad que hacían un cuadro muy bonito, tambien otra chica estaba sentada en el lado opuesto de la plaza de donde estaba yo. Poco a poco fueron llegando todos, y a las cinco menos cuarto estabamos ya todos listos. Mas pronto de lo normal. Caminamos calle arriba, en dirección a la tienda de chuches. Yo me lo estaba pasando bastante bien. Despues fuimos a los chinos, a cotillear un rato. Se me estaba pasando el tiempo tan deprisa que casi se me olvida que tenía que ir a clase de música, a practicar entonación, ya que no es mi fuerte... A las seis menos cuarto empece las clases, y a las seis y cuarto, aproximadamente, las acabé. Iba en dirección a casa ya cuando me encontre de nuevo con mis amig@s que subían a las canchas del colegio a jugar un rato al baloncesto. Solo faltaban dos chicas, que se habían ido a clases de baile. Asique allí nos fuimos todos, y nos lo pasamos muy bien jugando al 21, creo que se llamaba. Aunque la verdad que yo perdí, y creo que en última posición. Aún así me lo pasé genial. A continuación estuvimos viendo a unos chicos jugando al futbol y luego ya nos volvimos a bajar a la plaza, ya mas de noche, a sentarnos en la parada del autobus para charlar, reir y cantar. A las ocho y media regresé a mi casa después de una larga tarde, cené, y me tumbé en la cama a escribir estas palabras.
21-03-14
Superandoloimposible22 de marzo de 2014

4 Comentarios

  • Mateo

    Hola!!...a mi de joven me encantaba jugar al ventiuno..me ha encantado leer tu diario de tu dia...cuanto he recordado....lo que hacia yo de joven....además miro a mi hijo Alex de dieciséis....y me veo en el...sigue disfrutando de tu vida...y aprendiendo de ella....sólo Se vive una vez.....recuerdalo....un abrazo...cuidate....Se feliz y suerte con tus estudios....

    23/03/14 08:03

  • Superandoloimposible

    Gracias Mateo. Si la verdad que mas o menos los dias parecen que son lo mismo pero cuando los relatas te das cuenta que son bien distintosvunos de otros y que a lo.largo del dia ocurren mas cosas de las que piensas. Gracias por el comentario, cuidatee

    23/03/14 01:03

  • Albasilencio

    me gustan tus relatos, frescos y llenos de gracia.
    escribe más.
    un beso.

    25/03/14 12:03

  • Superandoloimposible

    Muchisimas gracias alba, tus comentarios me ayudan a seguir adelante.

    25/03/14 03:03

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