Quiero ya aferrarme a la cruda realidad, a luchar, a soñar o no volver a mirar atrás, a que todo pase, ha hacer de cada golpe una nueva oportunidad. Cuando sientes que todo acaba, que está perdido, nunca tires la toalla, eso es lo más fácil, pero en estas ocasiones se necesita escoger el camino difícil, ese camino en el que siempre te costara salir, pero casi siempre, tendrás a personas que conseguirán que tus momentos difíciles, tristes, aunque solo sean por un instante se vuelvan fáciles e insignificantes. Por ello necesitas salir adelante, ayudar a esa persona que tanto te necesita en estos momentos, que aunque no sepas donde agarrarte, como seguir adelante, de donde sacar fuerzas, siempre ha de quedar ese último aliento, que te haga aguantar esta situación, este mal estar, aunque fuera tengas que estallar, tengas que derramar lagrimas, e incluso pedir ayuda, pero recuerda que esa pequeña persona necesita ayuda. Que los caminos son difíciles, pero cuando no puedas afrontarlos más, siempre quedara una pequeña ayuda…aquella ayuda que cuando no quieras seguir adelante…te recogerá y te impulsara para que lo hagas, para que luches aunque veas que todo está perdido, que no queda nada.

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