Y en cada verso te encuentro y en cada estrofa escucho tu voz. Mirando la luna vi el brillo de tus ojos y el frío me recuerda el vacío que dejaste,
que dejaste en mi interior.
En mi interior buscando tu aroma por cada rincón, recorriendo cada parte de mi, esperando volver a verte.
Tu risa resuena a lo lejos,en plena oscuridad y yo la sigo, cómo seguía cada parte de tu cuerpo con mis manos y me depositaba en tu boca.
Esa boca que muchas veces me dejo sin aliento, hoy ya no me besa.
Abrí los ojos y suspiré.
Ya no estabas acá, y no estarías mas.
Me levante y me arranque el corazón de un tirón, ya no había más dolor. Camine sin mirar atrás, las lágrimas salían sin permiso y tu voz gritaba que no te dejara
pero no eras vos
era yo
era el amor que una vez te tuve
era mi corazón pidiendo que no te soltara, pidiendo a gritos por favor.
pero tenía que dejarte atrás.
Soltarte
Soltar la cuerda que tanto me estaba quemando las manos.
Y la solté, pero el costo de mi peso hizo que me cayera de espaldas, mis pulmones se quedaron sin aliento por un momento y miré de nuevo la noche oscura. Tan oscura como tus ojos , ese café intenso que no se podía ver más allá de eso
Las estrellas brillaban tan intensamente como mi amor por vos, mi amor por vos…
Reí
En un intento de recuperarme, me abrace y seguí.
Algo mejor vendría, algo mejor me acunaria en esta fría noche, algo mejor me abrazaría y la herida cerraría.
Esa herida que tenía tu nombre, una bala, un beso, una apuñalada, una sonrisa, un dolor insoportable.
Este inmenso dolor que me hacía recordar, porque era lo último que me habias dejado.
Adiós , adiós mi querido dolor.
Adiós, mi amor.
Caí, sin fuerzas sobre mis rodillas.
No podía más.
Ahora éramos la luz de la luna y yo . Alumbrando un camino que no conocía, pero debía seguir
Sin mi corazón, que te lo había dado ya hace tiempo.
Un cigarro prendí
una ultima mirada le di a la hermosa luna
y seguí.
