La luz obligaba a mis ojos a abrirse; ese brillo irritante que llenaba mi cara de un color naranjuzco. Me dí cuenta que mi cuerpo seguía flotando sin rumbo por este mar de arena, sobrevolando las dunas infinitas en un paisaje sin sentido y sin importancia...
Ella me trajo hasta aquí, me arrojó a esta vagancia con unas palabras tan suaves, tan llenas de dolor...
Se dio cuenta que me estaba volviendo igual que ella, y por eso fue que lo decidió así, ella no podía permitir que terminara con su mismo destino, "Al carajo el destino" le dije y sonrió con lagrimas...
-Soy un monstruo, - ella dijo - y te estas convirtiendo en lo mismo que yo.
Pensar solo eso la aterraba, siendo que a mi no me preocupaba en lo más mínimo, yo quería estar con ella, para siempre, hasta el final. Cerró mis ojos y me besó un suspiro...
Me estaba convirtiendo en un monstruo y no me importaba, al principio intenté que ella se detuviera, pero seguía destruyendo todo lo que tocaba y yo comenzaba a actuar igual. Por eso me envió aquí... para alejarme de ella y salvarme...
Ella creía que al final lo único que pudo salvar fue mi alma, pero en realidad esta se había quedado con ella...
Ahora vago este mar de arena, tratando de entender porqué demostró que me amaba en el último momento quitándome de su vida, ella mató el monstruo en mí y se entregó a esa destrucción ahora... ella mató el monstruo en mí...
