Más Desgracias
Tras oír tus gritos,
cojo la cuchara que tengo en frente.
Y sin saber donde esta mi mente,
empiezo a comer rápidamente.
Sin ganas ni de beber
ni sin saborear lo que estoy tragando.
Una cucharada,
y otra y otra más, mientras me voy ahogando.
Hasta sentir que el estómago me esta quemando.
Intenté no llorar,
pero ya se hizo tarde, me arde.
Y las derramé;
esas malditas lágrimas que dañan mi interior,
y que me hacen sentir peor.
Incluso más de lo que soy.
Se cayó,
todo el esfuerzo que hice para que subiera.
Si el supiera...
lo sensible que puedo llegar a ser,
sin poder controlarlo y sin saber que hacer.
Me pierdo en mi propio mundo
donde caí sumergida en mis lágrimas,
y donde ahora me hundo.
Esta claro que,
cuantos más sueños tengas
más pesadillas se acercaran.