TusTextos

Seiko 3000 - Capitulo 78 - ¡¡¡ya!!!

El fragor de la música. Los aullidos del público. Las sonoras bocinas de los barcos. El ajetreo de los talleres. Nada de eso parecía desconcertar a Cassandra cuando se despertó el gran día. Se dirigió sin distraerse a las duchas y luego se vistió. Poco más tarde ya estaba subiendo al almindren. La gente la esperaba
Las gradas se disponían sobre barcos especiales o en tarimas flotantes. La mayoría apostaban por verlo en televisión o en numerosas islas que salpicaban el archipiélago de Bahía Cost y por donde recorrerían aquellas lanchas en pocas horas
- ¿Preparada? – la voz de Marina se había convertido en la guía de Cassandra en el mundo en el que estaba viviendo. Estaba sentada, con su mono especial lleno de publicidad y un casco especial que le comunicaba directamente con el barco nodriza
- Sí – dijo Cassandra tras abrir los ojos. Eso y el pedir al cielo buena suerte era una costumbre de la joven. Era una joven que estaba cumpliendo un sueño de su niñez.
El almindren salio del barco surcando el agua y brillando en el abarrotado puerto de Miralba. Un público entregado, que enarbolaban banderas de Integra, la jaleó.
Fue despacio hacia la parrilla de salida situándose entre el Agedia de un gris perla y el Deovosio rojo fulgurante. Tenía al Brilla azul y plateado justo delante y más arriba, al almindren rosa de Kovalan. Por detrás, un amenazante Comet de COGESEK (habían cambiado el nombre horas antes), un Fugaz compacto y preparado, un Eureka peligroso pero bien formado eran sus más directos perseguidores. Correrias y Genesis cerraban el grupo de la serie A.
La FIAL se había esmerado en que la organización fuera mejor que la anterior cumpliéndose el dogma de la federación. Crear un espectáculo nunca visto hasta entonces. Tras el cese de la música y que el dirigible se hubiera situado por delante de la línea de salida y se diera la confirmación de que el recorrido estaba libre, el semáforo de salida se encendió. Las cinco luces rojas indicaban que iniciaran sus motores en modo carrera. 3 segundos después, el color ámbar les indicó que se preparasen. Y 5 segundos después, con el color verde, daba la señal de salida.
Kovalan salió bastante mal al comienzo y pronto se vio adelantado por Brilla. Agedia, que no era sinónimo de aceleración, cayó a la 4ª plaza tras que Cassandra le adelantase antes de la primera curva. Deovosio se desprendió de Comet, como Cassandra hizo con Agedia, en pocos minutos y tras unas sinuosas curvas. El público rugía, los adelantamientos al comienzo eran un buen gancho para la audiencia. Además, Kovalan, tenía severos problemas desde el comienzo y empezó a descender alarmadamente de posición. Algo que aprovecharon todos los primeros que ascendieron un puesto más. A mitad de la carrera, Brilla lideraba con una ventaja de unos 5 segundos a Integra, que sorprendía con una segunda posición. Agedia y Deovosio estaban luchando encarnizadamente por la 3ª posición. La velocidad punta contra la aceleración. Era una lucha titánica en cada curva del trazado por ver quien subía al podio. Detrás de ellos Comet reñía con Fugaz, Kovalan y Eureka muy peleones que no le dejaban escaparse, el equilibrio eran las ramas del los dos últimos, mientras que la velocidad y la aceleración eran las aliadas de Comet y Fugaz, respectivamente. Aunque un grave golpe del almindren de Kovalan contra el Comet daño parte del fuselaje interior y el equipo que obtuvo la pole quedó fuera de la lucha y cayó 9º, sólo por delante de un Genesis falto de garra y poco peleón. Las cosas no cambiaron demasiado para cuando todos acabaron la carrera. Brilla se hizo con la victoria e Integra le siguió como segundo. Deovosio (3º) acabo por ganarle la partida a Agedia (4º) y Fugaz (5º) a Comet (6º) y Eureka (7º). Correrías acabo por sumar un punto con un merecido octavo puesto y los dos restantes, Kovalan (9º) muy dañado y Genesis (10º) muy lento, cerraron la 1ª jornada en la serie A. Tras barrer el terreno dio comienzo la serie B. Horas mas tarde se entregaron los premios. Cassandra no cabía en sí de gozo…
“Tremendo” “Brilla se resiste a abandonar como perdedora” “Brilla apunta alto” Éstos fueron los comentarios de varios medios con respecto a la victoria de Vania Hamiken la piloto de Brilla. “Integra, la sorpresa” “La Deltario sorprende en casa” “¿Sustituta o piloto estrella?” eran los comentarios hacia Cassandra y su equipo. Aunque Marina las aceptó con mal humor, pudo hacer de tripas corazón y alabar el trabajo de su compañera a pesar de la “buena suerte” con el tropiezo de Kovalan, la poca rapidez de Agedia y de su ascenso de posición después de la clasificación.
Kovalan era quien peor lo tenía. “Desastroso” o “Decrepito” eran los titulares que reflejaban la penosa actuación del veterano equipo. Fueron los primeros en decir que debido al controvertido morro del Comet, habían acabado por no sumar puntos
- Está visto que los más ricos siempre acaban por callar las bocas de los árbitros
Dijo el director de Kovalan, Tabuko Kiyamasi, atribuyendo la culpa a Comet COGESEK Team de su “Desastroso” comienzo en una rueda de prensa posterior.
Le llevaría horas reparar el fuselaje, puesto que había seccionado cables importantes del nervio principal, la vía por la cual se suministraba la energía a los motores por debajo del agua. Aunque Correrias y Genesis se prestaron ayudarles a recuperarse, rechazaron la generosa oferta para no hacer que la FIAL les multase a todos los equipos caritativos.
El equipo Eureka Racing (otro que también cambió su nombre poco antes del inicio) estaba contento de su actuación aunque no se conformaría con posiciones inferiores. Querían luchar con el titulo en la medida que esto fuera posible.
Fugaz estaba muy satisfecha con su puesto y su buena actuación, quedando por encima de un grande como Comet. El equipo estaba dispuesto a forzar al almindren para conseguir un puesto en el podio. Al igual que Agedia que estaba sacrificando un poco su velocidad punta para dar caza al equilibrado Integra y el veloz Deovosio. Comet se resistió a hacer comentarios ya que muchos medios le acusaban de “Avasallante” “El equipo con una sola mira” “Los malos perdedores” tras ver el lamentable incidente con Kovalan.
El resto comentó por encima sus actuaciones y sus futuras modificaciones para la carrera del martes siguiente desde la isla donde estaban hasta el crucero de combate “Invictus” que, más que vigilante, era un icono de Bahía Cost y su archipiélago. Ambos se situaban en la pequeña isla de Oshio y una zona de vientos racheados y fuertes. Una contrariedad para los almindrens puesto que debían usar la configuración más baja para ir a ras del mar y no volcar debido al fuerte viento. Era una etapa de media longitud (150 Km.) pero debida a las inclemencias, era una de las más lentas. Sobre todo por las curvas, ya más sinuosas y a un peligroso cruce en los que más rezagados y los primeros, podrían chocar con resultados fatales. Pero eso era algo que encandilaba al público y los almindren disponían de suficiente seguridad para que la piloto conductora, no sufriera ningún daño considerable. Cada cabina de almindren podía ser eyectada bajo alguna eventualidad y asegurada por el propio equipo en un tiempo récord. Además, salvo Genesis, todos los motores (superiores) estaban sellados de tal manera que se harían burbujas protectoras para asegurar la cápsula de Seiko con la que corrían.
Para que funcionara el Almindren se tenía que dejar el paso abierto para la entrada del aire. Luego, unos dispositivos llamados “bronquios” seleccionan oxígeno y lo almacenan para que se reaccione con Seiko con el resultado consabido. Varios equipos usaban el sistema “mecánico” basado en un motor de explosión que hacía equilibrar la lancha en aspectos como velocidad y aceleración sacrificando el peso, y por lo tanto, la estabilidad debido a los engranajes y barras transmisoras. Lo usaban equipos como Integra, Kovalan o Correrias con resultados dispares. La mejor opción parecía venir con el aspecto “eléctrico” de la energía. El resto de los equipos, con el sistema usado en los Convertidores de Seiko en pequeña escala, trasmitían energía eléctrica y, sin perdidas, a los motores que impulsaban el almindren por debajo del agua. Gracias al poco peso, podían aumentar parámetros como velocidad punta o la aceleración considerablemente. Cada equipo decidía entre equilibrio o entre superioridad-inferioridad.
Y eso era algo que, ni Cassandra ni sus amigos, eran capaces de entender.
Keitaro03 de septiembre de 2009
Chat