Bonito y potente poema, pleno de autoconfianza y convencimiento. Envidio no poder dar unos saltos como los tuyos, pero los tullidos de todo tipo dificilmente nos aguantamos a ras de suelo, sea en el lugar geográfico que sea.
¡Un abrazo!
29/06/11 03:06
No seria yo quien te invitara a casa...... jejeje
bromas aparte, precioso.
Antonio
29/06/11 09:06
Tanito, tu interpretación esta vez se equivocó.
No hay confianza ni convencimiento, es sólo una descripción de lo que ocurre cuando una persona pretende ser ella misma. Hay gente manipuladora y victimista que la culpan de sus propias incapacidades, que no suelen ser físicas.
29/06/11 11:06
Yo tampoco hablaba de tullidos físicos. Y hablo de potencia, la potencia no es un hecho, es la capacidad para poderlo ser. Tambien se que cuando hablas de ladrillos destrozados, incendios y limos, rastros de azufre etc, tampoco hablas de lugares físicos. Creo que tu tampoco interpretaste bien mi comentario. Espero que no te moleste mi aclaración.
¡Besos!
29/06/11 11:06
Fuerza en cada verso y el remate final color esperanza.
Avivas mi instinto.
Abrazos
30/06/11 08:06
Intentando no caer en la adulación, te diré: Eres muy buena en esto. Es brutal lo que te llevo leido hasta ahora.
01/07/11 10:07
Pues nada, voces, cuando quieras nos cogemos de la mano y nos damos un saltito, a ver qué pasa jajajaa... Un beso.
01/07/11 03:07
Pues como caigas, primo, cojo un pañuelo para babear un poco, jeje.
En serio, gracias por tu comentario, colega.
01/07/11 03:07