Beth
El mar...el horizonte, todo tiene algo de magia y que al menos a mi me sirve para refugiarme en las horas más negras. Tu texto me ha recordado esos momentos en que se busca la soledad del mar, su sonido y su engañosa quietud, porque el mar o la mar, nunca se detiene. Es puro fluir, como la vida misma
14/01/12 08:01