Si tú me amaras no tendría que pasar las noches escribiéndote palabras de amor, bastaría con estar a
tu lado, sintiendo el calor de tu aliento y la humedad de tus labios, bastaría con beberme el
perfu...
Es la maldad una compañera extraña, vive en ti, a veces se manifiesta en los más perturbadores de
tus sueños y en las más extrañas de tus fantasías lucidas. Creemos ilusamente, que ignorando la
oscuri...
Miro por la ventana y hablo con las estrellas, pongo mis palabras en la brisa y espero que éstas se
eleven hasta la cúspide del cielo. Hablo con las estrellas porque ellas te miran, porque ellas te
es...
Escucho tu voz en el silencio. Aunque sea tan sólo un eco de la memoria, siento el llamado de tu voz
y el calor de tu aliento, escucho las palabras de un amor desvanecido por el tiempo, de un
fantasma...
México huele a sangre y pólvora, Y nosotros, los que estamos vivos hemos puesto nombre y apellido a
los culpables; decimos Felipe Calderón, Genaro García Luna, Gral. Guillermo Galván, Los policías
cor...
En tus ojos hundí mi tristeza, en tus pechos mis ansias y en tus piernas mi pasión. Caminaba
sediento por la vida y en tu corazón conocí la saciedad, de tus manos tome el calor que le dio vida
a mi al...
Te miro mientras duermes abrazada a las almohadas, y mi corazón late al ritmo de tu respiración,
miro también tu expresión de paz, tus labios entreabiertos y tu cabello rubio derramado sobre las
saban...
He de admitir que no te conozco. No sé como huele tu piel después del sexo, tampoco sé como brilla
tu mirada cuando el amor invade tu ser, tampoco sé cómo se mueven tus manos cuando erradican la
nost...
Siento la cálida furia de tu pecho enardecido y la quieta mirada de tus ojos sombríos, el sudor de
tu piel sobre mi piel y la suave frialdad de tus manos inquietas. Siento tantas cosas mientras la
lu...
Porque entre lágrimas y tragos de alcohol el amor no se desvanece, éste queda impregnado en el
corazón, forma parte de él, lo nutre y lo despedaza al mismo tiempo. El dolor del desamor, la
nostalgia, ...
Lentamente, me bebo las lágrimas que ruedan por tus mejillas, pero no me saben a sal, ni a tristeza,
simplemente ya no me saben. Soñé despierto, nuevamente fue tu imagen la que se apodero de mi
noctu...
Ya nadie recuerda la oscuridad, sin embargo yo estuve ahí, cuando el silencio gobernaba y el viento
helado cortaba la piel como navajas oxidadas, cuando el amor era un eco, cuando los sueños y las
pes...
Era insólito, las callejuelas y plazas de la ciudad se encontraban inundadas, la lluvia no había
cesado durante 46 días, 3 horas y 18 minutos. El cielo parecía enfurecido y el destello fugaz de los
re...
El humo nicotinizado que en finos aros se elevaban por el tugurio, envolvían la antigua melancolía y
le daba un halo de misticismo a este teatro alcohólico de risas fingidas y nostalgias ajenas. Era
u...