TusTextos

Tus Señales

Seamos sinceros, yo, aunque intente disimular mis sentimientos, soy un libro abierto. Y con esto, no solo me refiero al amor, si no a la felicidad, tristeza, enfado... Pero, por lo que veo, tu eres mucho mejor actor que yo y, a expensas de salir perjudicada, he de decir que, el otro día, tu actiación no fue tan buena como siempre fueron.
Desde que comencé esta etapa, siempre me has animado a conocer gente nueva, por no decir que casi te ha faltado echarme a los brazos de otro hombre. Pero ahora, ahora sí que estoy confundida... Si, desde que te conozco, has hecho esto, ¿por qué a la hora de la verdad siento que te pones celoso? Sí, celoso, y es que tú mismo te has descubierto.
Comencemos por el principio, y por esa palabra que utilizó una amiga mía para referirse al chico que estoy conociendo y que no eres tú: NOVIO. En ese instante tus ojos parecían platos, y tenías demasiada curiosidad por saber quién era, hasta que nuestra otra amiga dijo "solo se están conociendo", ahí pude observar como tu postura corporal se relajaba. Desde ese día fuiste amabilidad pura conmigo, volvías a ser el que eras al principio, a tus piques, a tus dobles sentidos... Y esa noche, viniste a jugar al pádel. Cambiábamos cada poco de parejas, y siempre notaba tu mirada en mí, jugara o yo o jugaras tú. Cuando jugamos juntos, ganamos. En ese instante se apagaron las luces de la nave y, de la emoción corrimos el uno junto al otro a saltar abrazados. Después de eso, todos bajamos a cenar. Me hiciste una de tus bromas, me escondiste el bolso, y cuando te pedí que lo devolvieras me garreaste como un niño pequeño, y para qué mentir..., me encanta. Cambiamos del restaurante a un bar para tomar una copa, y ahí me senté a tu lado. Me dejaste jugar con tu reloj, desajustarte la hora, quitártelo, ponértelo, y en un momento dado, estábamos cogidos de la mano sobre mi rodilla. Yo aparté mi mano y tú la dejaste rozando mi pierna por lo menos medio minuto, hasta que la situación se volvió incómoda. Volvimos a cambiar de bar, y una amiga en común con el chico que estoy conociendo hizo un nuevo comentario: "para el año boda, dentro de 2, los niños, ¿no?". Tu cara otra vez fue un poema, y empezaste una conversación con Ella. Quizá para no pensar en esa frase, quizá para darme celos. Pero eso no fue la guinda del pastel, si no que, media hora después, llegó al bar ese otro chico, y la situación se puso muy tirante entre tú y yo. Como dije al principio, puedo disimular muchas cosas, pero sentimientos tan fuertes... no, y por lo que pude apreciar, tú tampoco.
Después de eso, cuando nos íbamos, decidí parar en una farmacia de guardia a comprar mi antihistamínico. Como ese chico se quedó conmigo todos pensasteis lo que no era, y tú ya no pudiste más. Comenzaste a interrogar a mis amigas, que si estábamos juntos, que por qué si nos estamos conociendo, algunas lo llaman mi novio, que desde cuando estamos, si no podíamos parar en otro momento y no delante de ellos a comprar "eso" en la farmacia. Después, mientras subíamos la cuesta, apenas me hablaste. Y yo... yo ya estaba de nuevo herida.
Lo que saco de esto es... ¿Por qué si me dijiste que no buscabas nada, por qué si desde el principio me rechazaste indirectamente, por así decirlo..., por qué te pones así? Tienes que darte cuenta de que, si no sientes nada por mí, debes decírmelo claramente, y si ves que estoy conociendo a otra persona, es para olvidarte, porque cada día asumo que no estaremos juntos, y a la misma vez, siento que me enamoro más de ti.

Tus señales, contradictorias, adorables y dolorosas.
Tsuki-ga-kirei30 de octubre de 2022

Más de Tsuki-ga-kirei

Chat